Por más que me plantee mandarte sutilmente a la mierda la próxima vez, nunca lo hago. Antes de que yo dé el paso, apareces con el traje de ángel y me pillas en un momento de bipolaridad positiva... y entonces nos reímos y pienso en cómo te voy a hacer eso... y en cuánto perderíamos.
Pero, ¿cuánto me estás haciendo perder tú? Si pudieras hacerte una ínfima idea de lo que duelen tus "ahora no pero sí", "ahora sí pero no", "tal vez"... ¿De verdad es tan difícil decidirse? Sólo quiero una respuesta. Una y ninguna más.
Hasta me duele verte reír mientras me rompes el corazón sin piedad alguna... y mira que durante mucho tiempo hacerte sonreír ha sido lo mejor que me ha pasado; pero... ¿realmente hemos cambiado tanto?
¿Por qué?
COMENTARIOS
1. Flu! Jaja "a salvo" jajaja. La sensación de victoria... mmm... jaja. En la próxima participamos, ¿no? :)
Canción: Ámame o déjame
De: Mónica Naranjo
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Claro que si!
ResponderEliminarEn cuanto al texto a esos caballeros a los que les gusta destruir corazones solo por placer,lo mejor es darle un poquitin de su propia medicina (y yo no soy vengativa)(igual avisame cuando empieza la matanza :P )
Besos!